El blog del Sulayr: Ermita Vieja de Dílar (23-5-2010)

La Ermita Vieja de Dílar es uno de los parajes más bellos de la Sierra de Manar. Ya no quedan restos de la antigua Ermita, y en su lugar se levanta una construcción para la vigilancia de incendios durante el verano.

Comienzo la ruta en Granada, atravesando las localidades de Huétor-Vega, Cájar, La Zubia y Gójar. Una vez que llego a Gójar me desvío a la izquierda pasando por el cementerio. Tomo el camino de la derecha que me llevará a la parte más alta de la Loma del Bufón. Desde aquí podemos contemplar unas buenas vistas de la Sierra de Manar, la Boca de la Pescá y la Vega de Granada. Una vez en lo alto del cerro me desvío otra vez a la derecha para descender a través de los Llanos de Alcantara hasta el Río Dílar. Al llegar al puente del río me desvío a la izquierda por el carril que en paralelo al río me llevará a la zona recreativa que hay junto al Aula de Naturaleza. Una vez allí, tras un breve descanso cruzo el puente sobre el Río Dílar y me dirijo en dirección al Aula. En éste punto hay que buscar un pequeño camino que parte justo en la curva que nos llevaría al Aula. Tomamos ese camino y en pocos metros desenbocamos en el camino que asciende a la Ermita Vieja. Durante el recorrido (5 km) por éste camino atravesamos numerosos barrancos y bosque de pino. Es un paseo muy agradable y con buena temperatura. Poco a poco vamos alcanzando altura y las vistas de la vega y la Boca de la Pescá son hermosas. Por fin, llegamos a la Ermita Vieja (1350 m), siguiendo las indicaciones. En las inmediaciones hay una fuente de agua cristalina donde se puede llenar la cantimplora. Tras realizar unas fotos de rigor, continuo la subida hasta alcanzar el carril que a la derecha me llevaría al Padul y a la izquierda al Cerro de Montellano (1401 m). Tomo éste último, para en continua subida alcanzar el cerro. Las vistas desde aquí son muy bonitas, con el Cerro del Caballo casi a nuestro alcance, el Valle de Lecrín, Nigüelas, Dúrcal, Padúl, etc. También divisamos una gran red de carriles que nos llevan hasta el pueblo de Lanjarón. Tras un ratito de parada, retrocedemos y sin abandonar nuestro camino, descendemos con vistas a los Humedales de Padúl, hasta Dúrcal para tomar la nacional 323 que nos llevará a Granada.